Plataformas vibratorias: verdades y mentiras
Javier Fuertes Sánchez
Cuando en los años 80 aparecieron las primeras plataformas vibratorias, al parecer un invento soviético destinado a mejorar el entrenamiento físico de sus astronautas, pocos podían imaginar que llegarían incluso a ser producto de la Teletienda, anunciándose como el milagro que permite tener un cuerpo 10 sin esfuerzo.
Si vamos a hablar, como dice el título de este artículo, de verdades y mentiras, deberemos comenzar diciendo lo que seguro que muchos ya intuís: Lo de conseguir un cuerpo 10 sin esfuerzo es mentira.
Ah, y lo de producto milagroso también es mentira.
La única forma de conseguir un cuerpo 10 (bueno, o 9, o quizá 6,5, según cada caso) es cuidando tu alimentación y trabajando tu cuerpo, aunque (ahora viene la verdad): La plataforma vibratoria es una excelente herramienta a la hora de tonificar tu cuerpo y completar tu entrenamiento.
No todo iba a ser malo, ¿no?
Las plataformas vibratorias generan una serie de vibraciones que se extienden por todo el cuerpo a partir de las plantas de los pies. Esto obliga a su vez, a los diferentes grupos musculares a contraerse para compensar el movimiento.

Las ventajas de su empleo son:
– Aumenta la tonificación muscular.
– Mejora la flexibilidad, la circulación sanguínea y la celulitis.
– Ayuda a completar otros tipos de entrenamiento.
En cuanto a las desventajas de su empleo:
– Se puede llegar a creer que con subirse a una plataforma 10 minutos al día ya hemos hecho todo el ejercicio que necesitamos. Error.
– No pueden ser utilizadas por todo el mundo, ya que existen una serie de contraindicaciones: Está contraindicado su uso en caso de padecer osteoporosis, trombosis, enfermedades cardiovasculares, enfermedades oculares como cataratas, desprendimiento de retina, pacientes portadores de marcapasos, DIU, prótesis de cualquier tipo, epilepsia y embarazo.
Además, lo mejor es que te supervise un profesional mientras la utilizas, ya que si quieres sacar el máximo partido no basta con subirse en ella, dar al botón y ya está. Lo ideal es realizar una tabla de ejercicios apropiada. Como verás tampoco es tan sencillo usarlas bien, si creías que no había que esforzarse es que también estabas equivocado en eso.