Índice
- 1 Elige bien tu desayuno saludable
- 1.1 – Desayuno tradicional con un café con leche (valora el uso de café verde por sus beneficios) y pan integral con aceite de oliva y tomate natural en rodajas
- 1.2 – Té verde más sándwich de jamón de pavo y queso fresco y un puñado de frutos secos
- 1.3 – Cereales integrales con leche y una pieza de fruta
- 1.4 – Huevo revuelto con una tostada y un zumo natural
Elige bien tu desayuno saludable
Desayunar bien es importante porque es la primera comida del día. Es la comida que ingerimos tras el prolongado ayuno de la noche y por tanto, debe proporcionarnos los nutrientes necesarios para comenzar con energía un nuevo día.
Si eres de las personas que se levantan con el tiempo justo por las mañanas, debes pensar que te estás saltando una comida importante. No se trata de que tengas que poner tu despertador una hora antes para cocinar, sino de planificar tu desayuno para hacerlo saludable y adaptado a tus gustos y necesidades (también a las horarias, claro).

Lo importante es adaptar el desayuno a tus gustos y permitirse también algún capricho, por ejemplo, la mantequilla a diario no es recomendable y es un error frecuente sustituirla por margarina light (que suele contener grasas trans) Si te gusta mucho la mantequilla es preferible tomarla sólo uno o dos días a la semana, por ejemplo el fin de semana, y optar por posibilidades más saludables el resto de los días. Igualmente, si te gusta la repostería lo mejor es decantarse, siempre que sea posible, por recetas caseras. Si adoras los cereales azucarados o chocolateados puedes tomarlos algunos días y tomar otro tipo de desayuno los otros días para compensar. Se trata de comer bien pero sin amargarse.
Un desayuno saludable puede estar compuesto de una fuente de carbohidratos complejos, una fuente de proteínas, ácidos grasos saludables y vitaminas. ¿Parece muy complejo?, ya verás como es más sencillo de lo que parece. A continuación vamos a daros diferentes alternativas:

– Desayuno tradicional con un café con leche (valora el uso de café verde por sus beneficios) y pan integral con aceite de oliva y tomate natural en rodajas
Este desayuno es típicamente mediterráneo. La fuente de proteínas es la leche y la de carbohidratos el pan. El aceite de oliva aporta las “grasas buenas” y el tomate vitaminas, minerales y fibra. También puede añadirse un poco de jamón ibérico.
– Té verde más sándwich de jamón de pavo y queso fresco y un puñado de frutos secos
El té es antioxidante y estimulante al empezar la jornada, además ayuda a depurar el organismo de toxinas tras el ayuno nocturno. El pan del sándwich aporta hidratos de carbono y el jamón de pavo y el queso las proteínas. Por otro lado, un puñado de frutos secos te dará un plus de energía, vitaminas, minerales y fibra.
– Cereales integrales con leche y una pieza de fruta
Este es otro clásico, los cereales integrales son fuente de hidratos de carbono y fibra, la leche es fuente de proteínas y la fruta de vitaminas, minerales y ¡más fibra!.
– Huevo revuelto con una tostada y un zumo natural
Otra combinación completa donde hay vitaminas que encontramos en el zumo natural, proteínas y vitaminas del grupo B en el huevo, e hidratos de carbono en la tostada.
Como veis, las combinaciones son muy variadas y encontraréis aún más ejemplos en nuestro artículo Siete desayunos saludables.