Adicción al dulce en los niños. Cómo evitarla

Adicción al dulce en los niños. Cómo evitarla

Natalia López Bueno

Si a todos nos encantan los dulces, a los niños aún más.

Es normal que los peques de la casa coman de vez en cuando chucherías, chocolate y caramelos, ¡por algo son niños! Sin embargo, un exceso de este tipo de productos (como en la adicción al dulce) puede ser perjudicial para su salud, debido, por un lado, a los problemas derivados del exceso de este tipo de golosinas, y por otro a que un exceso de dulces, puede provocar en los niños un problema nutricional serio, ya que si consumen dulces sin control, se llenarán de alimentos ricos en calorías vacías y pobres en nutrientes.

Por otro lado, prohibir este tipo de productos a un niño es prácticamente una misión imposible, además de contraproducente. Entonces ¿qué podemos hacer? ¿Cómo podemos evitar que nuestros hijos se conviertan en adictos a los dulces?:

–       Educar desde pequeños en los principios de una alimentación saludable y equilibrada es el mejor camino para evitar la adicción al dulce. Para eso deberemos predicar con el ejemplo organizando menús saludables que deberá tomar toda la familia.

como-evitar-la-adiccion-al-dulce-en-los-niños
Cómo evitar la adicción al dulce en los niños

–       Evitar beber refrescos como norma habitual: La bebida principal de las comidas deberá ser el agua. Los refrescos se tomarán únicamente en ocasiones especiales.

–       Evitaremos tener en nuestra despensa dulces no saludables como caramelos, chucherías, bollería industrial…

–       El chocolate es un alimento muy nutritivo para los niños siempre que no se coma en exceso: Lo mejor es que lo guardemos nosotros y así podremos controlar la cantidad que toman y darlo en el momento adecuado, por ejemplo, un trozo de pan con chocolate es una buena merienda para los niños, aunque lo ideal es que no sea la misma merienda todos los días.

–       Siempre es una opción más saludable la repostería casera que la industrial: Si es posible, es mejor hacer una tarta o bizcocho casero. De esta forma evitaremos las grasas saturadas ya que controlaremos los ingredientes.

–       Acostumbrar a los niños a que cuando les regalen golosinas (cumpleaños, Halloween…) no se las coman de golpe y se las administremos nosotros.

–       Acostumbrar a toda la familia a que el postre sea una fruta o un yogur y sólo en ocasiones sea un dulce.

Educar un niño nunca es fácil, pero esperamos que nuestros consejos os puedan servir de ayuda y desterremos el riesgo de la adicción al dulce.

Scroll al inicio