Beneficios del baile para la salud
Raquel Fernández Vega
Cuando hablamos de la importancia de practicar algún tipo de actividad física solemos pensar únicamente en hacer deporte, por eso mucha gente, si no son especialmente deportistas, se desanima. Sin embargo el baile, una actividad generalmente asociada a momentos de diversión, es una forma excelente de ejercitar no sólo nuestro cuerpo sino también nuestra mente.
Bailar contribuye a mejorar nuestra salud física y psicológica y es que son muchos los beneficios que nos proporciona el baile.
– Bailar contribuye a fortalecer nuestro sistema musculo- esquelético: Fortalece músculos y articulaciones a la vez que mejora la postura y la flexibilidad. Cuando se fortalecen los diferentes músculos, en especial los de la espalda, no es extraño que se corrijan malas posturas y desaparezcan muchos dolores de espalda derivados de estas.
– Mejora la salud cardiovascular: Como cualquier otro ejercicio de tipo aeróbico fortalece el corazón, los pulmones y contribuye a controlar la tensión arterial.

– Ayuda a adelgazar: El consumo de calorías puede ser grande y por tanto ayudarnos a mantener nuestro peso ideal o a adelgazar. El consumo calórico dependerá del tipo de baile que practiquemos y de la intensidad con que bailemos, pero curiosamente se ha comprobado que, personas generalmente poco motivadas a hacer ejercicio al bailar pierden más calorías que al practicar otros ejercicios aeróbicos. Esto suele deberse al factor psicológico que asocia bailar a fiesta y diversión, por lo que la actividad física se realiza con menos esfuerzo mental del que se realizaría si por ejemplo se estuviera practicando running. De esta manera la persona en cuestión puede estar bailando de forma intensa durante más tiempo del que aguantaría practicando otro ejercicio aeróbico.
– Ayuda a regular los niveles de azúcar y colesterol en la sangre.
– Produce sensación de bienestar tanto físico como mental: Se produce liberación de endorfinas lo que provoca una gran sensación de bienestar, aumento de energía y reducción del estrés.
– Mejora la coordinación y la memoria debido a que también se entrena al cerebro para aprender una serie de pasos y coreografías.
– Contribuye a mejorar la autoestima: Cuando se lleva tiempo practicando y se comienzan a notar los efectos positivos del ejercicio sobre nuestro cuerpo, la autoestima mejora.
– Disminuye el estrés, la ansiedad y el riesgo de depresión debido a la liberación de endorfinas.
– Al ser habitualmente una actividad grupal suele contribuir a mejorar las relaciones interpersonales.
¿No os parecen razones más que suficientes para empezar a bailar?